martes, 26 de abril de 2011

...

Vuelvo a caer en el mismo juego, en que parece que todo pasa, en el que parece siempre que no y desisto por completo de verte, de sentirte, de pensarte, entonces vienes con aires de normalidad, cuando yo digo no una y otra vez, llegas bien a perturbar mi calma, y cuando al fin te puedo dar la cara... entonces con un gesto de falsa pena dices que no, todo ha sido un mal entendido, aquí nadie recuerda nada, aquí nunca ha pasado nada y lo poco o mucho que pudo suceder se ha olvidado por completo. Estoy harta de decir que estoy harta, cuando vienen aquellos otros a decirme que has dicho que si recuerdas, que aun lo sientes, cuando te veo y desvías la mirada y te tiemblan los labios y solo abres la boca para decir "es una pena, pero no" ¿Es este un juego involuntario? Me cansé de seguirlo, me cansé de que midas el tiempo como si tuviera la obligación de esperarte por siempre y con esas mismas palabras lo has dicho, debo yo de quedarme con las manos vacías, dar y jamás esperar recibir algo, porque así tiene que ser y si bien la culpa la he tenido yo y lo merezco, aun así no lo acepto. Ahora, con una más encima, solo queda decir que es la última vez que he de caer, pero hasta cuando? No lo sabría decir, no con certeza, pero al menos por el tiempo más prolongado que pueda, por el tiempo que pueda alejarme de nuevo de ti, y espero que ahora sea de manera definitiva, aun cuando sea de nuevo yo la mala, como siempre lo he sido y como siempre lo seré, ... te he dicho de mil maneras que si me importa cuando dices que no y ni siquiera hay respuesta de tu parte. Saco otro cigarro de la caja, ya no quiero ni uno más, quiero pero no quiero querer, quiero tantas cosas que no quiero. Lo enciendo, con la firme disposición de que sea quizás la última bocanada provocada por ti.

Aun me sigues forzando, de manera casi imperceptible me llevas a ti, y yo... no me resisto, no intento zafarme, no hoy, mañana... mañana espero sin esfuerzo alguno alejarme de ti sin decir nada, sin fingir, sin fumar, sin llorar...

jueves, 21 de abril de 2011

...

Tu indiferencia me rompe el hígado y la conciencia... y si,  un poco los pulmones también.




Ni hablar del bolsillo.

♥Musique♥